El equipamiento del jinete es importante por la protección que supone para el propio jinete y, secundariamente, por la apariencia que dan al mismo. Encontramos equipamientos ubicados a la seguridad del jinete ya que la equitación, al ser un deporte de riesgo, exige todas las medidas de seguridad y protección posibles.  En cuanto al equipamiento más ubicado a la apariencia, encontramos toda la indumentaria del jinete, desde los pantalones de montar, las chaquetas de competición, plastrones y corbatas para los concursos... Evidentemente, el equipamiento más importante es todo el relacionado con la seguridad del jinete, y serán algunos de estos los que analizaremos a continuación.

Fuente: Armería El Lance
Fuente: Armería El Lance

El casco

Fuente: Raza Tienda Hípica
Fuente: Raza Tienda Hípica

El casco es el elemento más importante que el jinete debe poseer. Su función es básicamente de protección de los usuarios ante las caídas, algo más que frecuente en la práctica de este deporte.

 

La cabeza es una de las partes más delicadas del cuerpo humano y, es por ello, que en prácticamente todos los deportes de riesgo, entre los que encontramos todos los campos de la equitación, su uso es obligatorio e indispensable.

 

El casco debe ir perfectamente abrochado, con la tira ajustada a medida de cada usuario. Además, el casco no debe "bailar", es decir, debe tener la medida justa de la cabeza del jinete o amazona que lo porta. Para ello cada vez más fabricantes venden los cascos con rueda de ajuste.

 

En la alta competición, un jinete puede salir a pista con un casco o con una chistera, en función de sus gustos. La chistera es una especie de sombrero de copa (pero de copa pequeña) que algunos jinetes y amazonas como Morgan Barbacon, Edward Gal o Claudio Castilla eligen para salir a la arena y realizar sus pruebas. Lo cierto es que, decidan lo que decidan, los entrenamientos siempre deben realizarse con el casco, poniéndose la chistera solo para competir.

 

En los inicios, prácticamente todos los participantes utilizaban la chistera, elemento al que consideraban más elegante. Sin embargo, cada vez son más los profesionales que eligen el casco como opción principal. Ejemplo de ello son la campeona olímpica Charlotte Dujardin o los hermanos Matute.

 

Habitualmente, el casco en las pistas de competición es negro. Siempre el casco debe poseer el mismo color que la chaqueta o frac y las botas del jinete. En niveles inferiores se permite que el casco pueda también ser gris o marrón, aunque no es lo más habitual. 

Las botas

Las botas de equitación son otro de los elementos indispensables para cualquier persona que realice este deporte. Existen varias medidas de caña, variedad de colores y diversidad de diseños , ya que no se usa el mismo tipo de calzado para todas las disciplinas. En el siguiente apartado nos centraremos únicamente en las botas que utilizan los jinetes de la disciplina dressage.

La bota de doma clásica suele ser bastante rígida. Su caña es muy alta, ya que en esta disciplina la pierna del jinete no va tan flexionada como en salto o en el hipódromo y la bota, por tanto, no dificulta el movimiento.

 

Las destinadas a la competición suelen ser botas de cuero, de color negro, de caña más alta que las de entrenamiento y, casi siempre, sin cordones. La cremallera del cierre se sitúa en la parte interior de la bota. Esto tiene como motivo principal la estética, ya que esto no influye en la monta ni en la comodidad del usuario.

 

El taco de las mismas debe de ser ancho, facilitando la colocación del pie en los estribos del jinete. Además, lo ideal es que la suela sea lo más antideslizante posible, ya que el movimiento del animal muchas veces hace que el pie se salga del estribo, dificultando la monta e influyendo en el equilibrio.

 

La botas exigen un cuidado y mantenimiento cada vez que se utilizan. Primero deben humedecerse, quitando la suciedad más aparente. Tras ello, se rocian las botas con jaboncillo, extendido por un trapo. Lo ideal es que, después de esto, y una vez estén totalmente secas, se les embadurne con grasa y se les deje secar. Cuando toda la grasa se haya filtrado, se  usará betún negro o transparente para darles brillo. En el caso de que las botas sean de charol, se seguiría el mismo procedimiento, aunque sin aplicar el betún al final del proceso.

Estribos

Los estribos son una parte fundamental de la montura aunque no estrictamente necesaria. Es la parte del equipo donde el jinete apoya su pie, plantando únicamente los dedos con los que hace fuerza sobre el elemento y bajar el talón. Puede considerarse una herramienta que forma parte del equipamiento del caballo, aunque realmente es el jinete el que se beneficia de él, y es por ello por lo que lo englobamos en esta sección. El estribo se engancha en la montura mediante las acciones, cinchas de cuero que unen la montura con el estribo y que permiten que el jinete ajuste la longitud de los estribos a su medida. 

Fuente: Voltaire design
Fuente: Voltaire design

Hay una gran variedad de estribos distintos, aunque todos suelen estar fabricados en metal. Dentro de esta gama de posibilidades, encontramos los estribos de seguridad. Estos se diferencian de los normales en que tienen una parte desplegable que se abre cuando se ejerce presión sobre él. Por ello, en caso de caída, cuando hay peligro de que el pie se quede enganchado en el estribo, siempre se abrirá garantizando que el pie quede libre. 

 

En el caso del dressage, los estribos suelen ir muy largos, ya que un buen asiento en la doma clásica es vital. Además, a diferencia que en otras disciplinas, la doma es un deporte donde el jinete en todo momento va sentado, acompañando los movimientos del caballo con su cadera y con sus propios movimientos y ayudas; esto no pasa en salto, donde el jinete se levanta para facilitar el salto al equino, ni el el hipódromo por ejemplo, donde los jockeys van constantemente levantados para liberar el dorso del caballo y que sea más veloz. Aunque es obligatorio apoyar el pie en los estribos en las pruebas de doma, para entrenar el equilibrio muchos jinetes montan sin ellos.